Nodicia de kesos

En rigor, aún no se puede considerar asturleonés, sino de un estadio de latín que comienza a distinguirse del latín vulgar y a fragmentarse en varios protorromances, en este caso en leonés.

[4]​ El documento ya era conocido, pues es uno de los textos que Ramón Menéndez Pidal utilizó en su obra Orígenes del español en 1926 para dar cuenta del estado de los romances peninsulares en el siglo X.

Si es un pergamino reutilizado, tendría que haber dejado de tener valor legal; con este razonamiento propuso Ramón Menéndez Pidal como fecha posible para la Nodicia el año 980.

Fernández Catón y otros[1]​ proponen una datación ligeramente anterior, en torno a los años 974-975, debido a una referencia histórica contenida en el propio texto, concretamente la mención de una visita del rey Ramiro III.

El original se conserva en el archivo catedralicio de León, con la signatura Manuscrito 852v.