[5] Adrien, un hombre que se dedica a la compraventa de obras de arte, querría pasar el verano con su novia; pero ella había decidido pasar su verano en Londres.
Luego decide ir con su amigo Daniel, para pasar el verano en una casa del campo cerca del mar Mediterráneo en Francia, con la idea de simplemente dedicar su tiempo al ocio.
Adrien quiere vender un jarrón chino, de bastante valor.
Sin embargo, la tranquilidad de la vida de Adrien y Daniel está alterada por los movimientos de Haydée, que toma varios amantes, y en algún momento, tiene un romance con Daniel.
El deseo de Adrien se hace más evidente, después de dejar Sam y Haydée solos.