La Espero

Hay otras melodías que no suenan tan parecidas a una marcha militar, como la compuesta en 1891 por el sueco Cl.

Forte staras muroj de miljaroj inter la popoloj dividitaj; sed dissaltos la obstinaj baroj, per la sankta amo disbatitaj.

Nia diligenta kolegaro en laboro paca ne laciĝos, ĝis la bela sonĝo de l' homaro por eterna ben' efektiviĝos.

Fuertes se levantan los muros milenarios Entre los pueblos divididos Pero saltarán en pedazos las obstinadas barreras Que con sagrado amor serán derrumbadas

Sobre un fundamento lingüístico neutral Comprendiéndose los unos a los otros Los pueblos harán de común acuerdo Una sola gran familia

Portada de una edición de la partitura,
publicada en Varsovia después de 1911.