Este episodio está narrado en el evangelio de Lucas (Lc 1:26-39).
El cortinaje rosa a la izquierda se desvanece entre las nubes y frente al grupo de querubines delicadamente pintados, bajo los cuales hay una balaustrada, típica de la escuela veneciana.
El suelo embaldosado es claro, con cuadrados de color rosa pálido y otros grises.
[7] En el enlace La Anunciación (el Greco, 1570) se halla la debida información sobre esta obra.
Las dos obras difieren sobre todo por el acabado más preciso de esta pintura en Barcelona.