Línea K

Análogamente, la línea L es un cable similar que se utiliza para el establecimiento de la comunicación con una centralita electrónica, lo que se conoce como “fase de excitación”.

Tras establecerse el diálogo, la línea L toma permanentemente un valor de señal alto.

En la práctica, una inicialización de este tipo es inusual, puesto que en la mayoría de los coches se realiza a través de la propia línea K. Algunos automóviles de gama alta del fabricante alemán Audi usan la línea L para intercambiar datos; este comportamiento no se ajusta a los estándares y para llevarlo a cabo se requiere un adaptador especial, por lo general denominado "KKL" o "K/KL".

Las líneas K y L se utilizan primordialmente para la comunicación con el exterior (por ejemplo, para la diagnosis offboard de centralitas electrónicas en un taller).

Otra alternativa ya obsoleta son los circuitos electrónicos con optoacopladores.