Debido a esto, sólo oscurecía por un tiempo muy breve, y la gente no podía tener intimidad.
Kwányip decidió entonces distribuir el día y la noche de manera equitativa, haciendo que la oscuridad durara cada vez más.
Chashkel quedó fatigado al escapar de la trampa y luego Kwányip aprovechó la oportunidad para fracturar su columna.
[1] Otra versión del mito relata que Aukmenk entró en un estado de muerte temporal, tal como sucedía con los howenh.
Luego de unos días, Aukmenk comenzó a moverse, sin embargo, Kwányip hizo todo lo posible para que su hermano no reviviera.