Al nacer, el niño fue llamado Shintarō, lo que fue cambiado a Kiyoteru en 1877, cuando tenía 11 años.
Kiyotsuna fue también un retén de Shimazu, cuyos servicios al emperador Meiji en el período Bakumatsu y en la Batalla de Toba-Fushimi llevaron a su nombramiento en altos puestos del nuevo gobierno imperial, y en 1887 fue nombrado vizconde.
A los 17 años, se matriculó en los cursos preuniversitarios en francés, como preparación para sus estudios jurídicos previstos en la universidad.
A principios de 1886 Kuroda había decidido abandonar el estudio del derecho para una carrera como pintor, había tenido clases de pintura en su juventud, y había recibido un set de acuarelas por su madre adoptiva, como regalo a la salida para París, pero él nunca consideró a la pintura como algo más que un hobby.
Sin embargo, en febrero de 1886 Kuroda asistía a una fiesta en la legación japonesa para los nacionales japoneses en París; aquí conoció a los pintores Yamamoto Hosui Masazo Fuji, así como el negociador de arte Tadamasa Hayashi, un especialista en ukiyo-e.
Allí encontró la inspiración en el paisaje, así como una mujer joven, María Billault, que se convirtió en uno de sus mejores modelos.
Esta Gran obra, que lamentablemente fue destruida en la Segunda Guerra Mundial, fue aceptada con grandes elogios por la Académie des Beaux-Arts; Kuroda tenía la intención de traerla a casa con él a Japón para romper el prejuicio contra los japoneses en la representación de la figura desnuda.
Al mismo tiempo, Kuroda fue adquiriendo un papel cada vez mayor como un reformador, como uno de los pocos artistas japoneses que habían estudiado en París, estaba especialmente calificado para enseñar a sus compatriotas acerca de lo que estaba pasando en el mundo del arte occidental en ese momento.
Kume entró en algunas de sus obras en la exposición, al igual que varios estudiantes en el Dojo Tenshin.
El grupo celebró exposiciones todos los años hasta que se disolvió en 1911, en total, trece espectáculos fueron creados.
La pintura fue una gran empresa, sino parecer haber sido uno de los primeros para los que trabajaba Kuroda dibujos a carboncillo y bocetos al óleo.
Hablar sobre el Antiguo Romance parece haber sido concebido como un panel de pared, como con gran parte del trabajo de Kuroda, que fue destruida durante la Segunda Guerra Mundial, dejando sólo los estudios preparatorios para indicar su grandeza posible.
Kuroda fue por aquella época bien considerado no solo por los japoneses, sino por el mundo del arte en general, su tríptico Sabiduría, Impresión, Sentimiento (terminado 1900) fue exhibido junto a su trabajo junto al lago 1897 en la Exposición Internacional celebrada en 1900 en París; recibió una medalla de plata.
Para la mayoría de su carrera, Kuroda pintados en un estilo que, aunque básicamente impresionista, debe mucho a su formación académica también.
Pocos artistas han tenido un impacto en el arte japonés comparable a la realizada por Kuroda.