Entre 1722 y 1728 se explotaron los depósitos de sulfuro así como en el siglo XIX.
El científico alemán Robert Bunsen visitó el sitio en 1845 y, basándose en sus investigaciones en el lugar, propuso una hipótesis sobre la formación del ácido sulfúrico en la naturaleza.
[1] Cerca de los campos geotermales hay varios maars, que son cráteres volcánicos que se forman por la explosión de agua subterránea.
El inusual verdi-azul lago Grænavatn se formó en uno de esos maars.
Krýsuvík es un área de excursionismo muy popular, y se ha desarrollado cierta infraestructura turística.