[7] El manga continúa con la historia de Morinaga y Sōichi donde esta se dejó en Challengers.
Tetsuhiro Morinaga es un estudiante universitario que ha estado enamorado de su senpai, Sōichi Tatsumi, durante cuatro largos años.
Mientras tanto, Morinaga se lamenta con su amigo, Hiroto, por su amor no correspondido hacia Sōichi, quien a su vez decide darle a Morinaga una "bebida especial" que hará que Sōichi no sea tan tirano.
Morinaga se debate entre tirar la bebida a la basura, pero se siente incómodo ante la idea de que alguien lo encuentre, por lo que de mala gana lo lleva a su casa y lo oculta en su armario.
Al día siguiente, Sōichi sigue molesto y divaga elocuencias tales como que irá a los Estados Unidos para matar a Kurokawa o convertirse en el gobernador de California para re-prohibir el matrimonio homosexual.
Morinaga le convence de calmarse y que beba con él en su casa para ahogar sus penas.
Sōichi es una persona extremadamente tiránica, cruel ante el mundo y puede llegar a ser muy agresivo cuando se lo propone, tanto es así que fue apodado «tirano» por los otros estudiantes de la universidad y es temido por muchos.
No tiene ni desea amigos y por su tiránico carácter tampoco hay mucha gente dispuesta a serlo.
Oculta una faceta más amable reservada únicamente para su familia y, en algunas ocasiones, también hacia Morinaga.
Esta faceta suele ir acompañada igualmente de una violencia cómica, debido a que aparentemente le cuesta expresar sus sentimientos más amables.
Nació en un pequeño pueblo y creció en una familia sumamente conservadora para la cual, lo más importante eran las apariencias.
Kurokawa le permitió quedarse en su apartamento y en el proceso se enamoró de Tomoe.
Es un hombre bondadoso y amable, pareja del hermano menor de Sōichi, Tomoe.
Solía ser el mejor amigo de Masaki, pero su amistad se terminó de manera abrupta cuando Kunihiro le descubrió a él y a su hermano menor, Tetsuhiro, yaciendo juntos.
Su relación comenzó cuando Morinaga cursaba su tercer año de secundaria y la mantuvieron en secreto debido a la mentalidad conservadora del pueblo donde vivían.
Afortunadamente su intento falló, pero este suceso perseguiría a Morinaga durante años.