Su padre Derrick Holmes, era un mecánico de coches nacido en Jamaica, y su madre Pam Norman, una inglesa.
Dos años después de nacer Kelly su madre se casó con Michael Norris, un pintor y decorador a quien ella considera como su verdadero padre.
Tras ver por televisión los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992, donde participaban atletas británicas a las que ella había ganado en algunas competiciones, decidió retornar al atletismo y ponerse a entrenar en serio.
En una carrera muy rápida, el triunfo fue para Kelly Holmes con 1:56,38 por delante de la marroquí Hasna Benhassi (plata) y la checa Jolanda Ceplak (bronce).
La BBC la eligió como la Personalidad Deportiva del año 2004, un premio bastante prestigioso que se concende todos los años.
En la ceremonia donde le entregaron este premio estaban presentes las seis campeonas olímpicas británicas anteriores: Mary Rand, Ann Packer, Mary Peters, Tessa Sanderson, Sally Gunnell y Denise Lewis.
Las numerosas lesiones que tuvo a lo largo de su carrera le impidieron desarrollar todo su potencial mucho antes.
Sin embargo su doblete olímpico en Atenas la ha colocado junto a las más grandes atletas de la historia.