Fue ocupado en el Mesolítico si bien, circunstancialmente, recibió alguna visita de poca entidad durante el Calcolítico.Los trabajos arqueológicos fueron llevados a cabo por Andoni Sáenz de Buruaga en el año 1990.[2] También a este nivel corresponden unas conchas marinas -nasaridas- perforadas que formaron parte de un adorno personal: su presencia nos enseña las relaciones sociales que la comunidad aquí establecida mantenía con aquellas otras ubicadas en territorios costeros cantábricos.Este nivel se ha adscrito a la fase cultural del Mesolítico de muescas y denticulados.Todas encajan muy bien en la unidad cultural Mesolítico de muescas y denticulados.