Károly Markó

[1]​ Sus primeras obras retomaron los temas del romanticismo húngaro, tales como paisajes y castillos, los cuales fueron promovidos en un primer momento por la Academia de Ciencias de Hungría, así como paisajes topográficos.

[1]​ En 1822 inició sus estudios en la Academia de Viena donde se enfocó en los estudios de pintura histórica, convirtiéndose en su maestro Peter Krafft.

Durante su estancia en Viena, contrajo matrimonio y nacieron sus hijos, entre ellos el también pintor Károly Markó, el joven.

Gracias al apoyo financiero del banquero Geymüller, en 1832 se traslada a Roma, pasando por otras ciudades italianas como Florencia y Venecia.

En dicho lugar, así como con algunos viajes a Pest, continuó con su producción artística, en el que regresó a sus bases, realizando pinturas del paisaje húngaro.

Autorretrato (fecha desconocida)