Es conocido igualmente por haber sido el padre del arquitecto neoclásico Juan de Villanueva (1739-1811).
Es posible que estudiara durante su juventud en los talleres de Antonio Borja.
En este periodo conoce a escultores y arquitectos como Pedro Alonso de los Ríos o José Benito de Churriguera.
La amistad fue tan directa que el mismo Pedro Alonso de los Ríos al morir le cedió su estudio y biblioteca.
En 1726 escribió junto a Francisco Antonio Meléndez un memorial dirigido a Carlos III en el que solicitaba la creación de una escuela de Bellas Artes en Madrid.