Dada su formación técnica previa le encargaron la cámara y la fotografía para uno de los cortos.
El día antes de comenzar la filmación un amigo fotógrafo le enseñó los rudimentos -que no se ve la luz sino su reflejo en los objetos, que esos reflejos se pueden medir, que al igual que sucede con los ojos las películas son sensibles a esos reflejos- y le dijo cómo manejar un fotómetro de luz incidente.
La filmación debió suspenderse por ausencia de un actor pero el director quiso hacer una prueba, filmando sólo 4 o 5 metros de película reversible que luego revelaron en Kodak.
Le asombró lo bien que se veía la escena y, además, en ese laboratorio le dieron más información, en especial sobre ajustar la apertura del diafragma conforme la lectura del fotómetro, que usó en la filmación.
También estudió otras disciplinas complementarias, como por ejemplo Psicología Social con Enrique Pichón Rivière y afirma que al filme lo hace un grupo operativo.