[1][2] Amaya se inició futbolísticamente en Jorge Newbery, de su ciudad natal.
En el equipo del sur tucumano tuvo un gran rendimiento, sin embargo no pudo coronarlo con títulos.
[2] En 1957 se consagró campeón tucumano, cortando una racha de 5 años sin campeonatos anuales para la institución.
[4][5][6][7][8] Después del campeonato nacional con el decano, Amaya se traslada a la ciudad de Rosario, para jugar en Newells en 1960.
[2][9][10][11][12][13] En su primer año con la lepra perdió la categoría y descendió, pero al año siguiente se coronaría campeón de la segunda categoría, aunque las autoridades anularon el ascenso del equipo rosarino, en una polémica decisión.