Lecube nació en Ribadeo por cuestiones laborales de su padre, pero desde muy pequeño se crio en Bilbao.
Era primo hermano del futuro lendakari José Antonio Aguirre de Lecube, con el que estuvo viviendo varios años a partir del fallecimiento de su madre en 1906.
Destacaba por ser el jugador más veloz que había en España en aquel momento y porque llevaba un pañuelo blanco atado a la cabeza por cuatro nudos.
[3] En 1936 fue contratado como entrenador por el Gimnàstic de Tarragona, pero a los pocos días estalló la Guerra Civil española y no pudo retomar su cargo hasta que el conflicto terminó, en 1939.
Su trayectoria volvió a quedar interrumpida por la Segunda Guerra Mundial y no fue hasta 1951 que, después de sacarse el carnet de entrenador, relanzó su carrera en los banquillos fichando por el Lleida, recién descendido a Segunda División.