Juan Antonio Rodríguez Hernández

Su primera exposición tuvo lugar en Madrid en 1951; la última, en la Sala San Hermenegildo de Sevilla en la primavera del 2002, donde se ofreció una muestra antológica de su obra, junto a la de su padre Rafael Blas Rodríguez.

En su extensa producción trabajó temas de historia, mitológica y costumbrista, además de paisajes, retratos, bodegones y floreros, deleitándonos siempre con su realismo poético, lleno de sensibilidad y elegancia.

De su pintura se ha dicho que es un canto a la vida, por la alegría, optimismo y belleza que sabe transmitir a través de los pinceles.

El género religioso es lo más representativo del quehacer plástico de Juan Antonio, caracterizándose sus cuadros por una factura muy cuidada, en la que destaca su correcto dibujo, armoniosa composición y colorido luminoso.

Falleció por causas naturales y debido a su avanzada edad en Sevilla el 9 de enero de 2017.