[3] Uno de sus hermanos, Jerónimo fue también religioso y llegaría a ser obispo.
[1] En los años siguientes fue vicario general y gobernador de la diócesis de Barbastro y capellán militar.
[1] En 1792 fue elegido abad del monasterio de Montearagón,[1] con jurisdicción eclesiástica y señorial sobre varias localidades cercanas a Huesca.
Historiadores más modernos han continuado la historia del monasterio y registran que a su llegada el claustro había quedado reducido a apenas dos canónigos durante su gobierno, constando bajo la gestión de Joseph nuevas normativas para admitir más cofrades.
[4] Falleció en Huesca en 1814 durante una visita a su hermano Jerónimo.