Fue un próspero empresario que emprendió una serie de negocios en Bolivia y en el exterior del país.
Sin embargo, su predilección por el Club The Strongest era evidente, institución con los que había establecido fuertes vínculos, a tal grado que cuando dejó la presidencia del C.A.R.
En los siguientes años siguió con su labor dirigencial en el club, hasta que en 1984 es nuevamente elegido presidente de la institución, esta vez ocupando el cargo en solitario, por solamente ese año, para posteriormente seguir vinculado en la institución en diversos cargos.
Sin embargo su labor más destacada en esta institución fue la que realizó en su siguiente legislatura.
[2] Saavedra tenía excelentes relaciones con los principales dirigentes del fútbol sudamericano, así que después de realizar una gira pos Sudamérica buscando apoyos, se encaminó, presidiendo la delegación, a Zúrich donde logró una gran victoria diplomática al lograr en el año 1996 que la FIFA diera marcha atrás, al menos en esa década.