[1] Estuvo viviendo durante un tiempo en Madrid, para seguir los pleitos que afectaban a su familia.
Estando retirado en la Rambla, el levantamiento nacional le sacó de su retiro para ocuparse en la causa nacional, sirviendo su casa de la Rambla para organizar partidas, facilitando igualmente caballos, armas y víveres para los guerrilleros.
Su liberalismo provocó que en el año 1814 fuese perseguido, apresado y sujeto a un proceso, en el que el fiscal le pidió la pena capital, que se vio reducida a la de seis años de castillo, por su carácter militar como caballero maestrante, y a una multa de 6000 duros.
No obstante este movimiento fracasó, por lo que tuvo que exiliarse en 1818 a Gibraltar, donde se dedicó a componer e imprimir clandestinamente folletos revolucionarios para divulgarlos en España.
[3] No obstante, poco después tuvo que abandonar su puesto de Regidor al ser elegido Diputado en las Cortes Generales para los años 1820-1822 donde reclamó para España una unión federal.
Publicó un importante Manifiesto a la Nación española (Cádiz, 1822), que tuvo varias reediciones y traducciones.
Sin embargo, las tropas de Fernando VII pusieron fin con rapidez a la sublevación.
No obstante la presión del Rey español se fue haciendo cada vez más intensa.
A esto respondió Moreno de Guerra hipotecando sus propios bienes para ofrecérselos al sultán para que le permitiera quedarse.