Sin embargo la familia se trasladó en 1796 a Glasgow, donde el padre había sido nombrado pastor.
Tuvo una infancia enfermiza y se vio forzado a dejar la escuela a los doce años; pero cuando se recuperó fue enviado a tan temprana edad a la Universidad de Glasgow, donde mostró una extrema precocidad en el aprendizaje del griego, de forma que aún no tenía catorce años cuando ingresó en el Balliol College de Oxford y allí amplió sus conocimientos, pero fuera del plan de estudios regular.
Gracias al editor William Blackwood, que le adelantó dinero para que tradujera las Conferencias sobre historia de la literatura de Friedrich Schlegel, hizo después un grand tour por el continente y en 1817 visitó a Goethe en Weimar, aunque las Conferencias solo se publicaron en 1838.
Edimburgo era entonces un bastión del partido Whig, cuyo órgano era la Edinburgh Review, y no fue sino en 1817 cuando los Tory o conservadores escoceses encontraron un medio de expresión en la Blackwood's Magazine.
John G. Lockhart y John Wilson (que usaba el pseudónimo de "Christopher North") se unieron a su redacción en ese año, contribuyendo con críticas agresivas y cáusticas, aunque su biógrafo Andrew Lang negó que fuera responsable de los virulentos artículos publicados en ella contra el poeta Samuel Taylor Coleridge y "la escuela de poesía cockney" de Leigh Hunt, John Keats y sus amigos.
Por el contrario, contribuyó a las traducciones de la Blackwood's Magazine haciendo versiones en inglés del Romancero, que reunió para publicarlas exentas en 1823.
De hecho, contribuyó él mismo en gran medida a la Quarterly Review, en particular con artículos biográficos.
Y todavía mostró su vieja crítica literaria burlona en un artículo del Quarterly contra los Poemas (1833) de Alfred Tennyson.
Sin embargo, su obra principal, y por la que es más conocido, es Life of Sir Walter Scott (7 vols., 1837-1838; 2ª ed., 10 vols., 1839).
En 1853 renunció a seguir dirigiendo la Quarterly Review y pasó el siguiente invierno en Roma; sin embargo, regresó a Inglaterra sin haber recuperado la salud y fue llevado a Abbotsford por su hija Charlotte, que se había convertido en la señora James Robert Hope-Scott y se había convertido al catolicismo.