[1] En 1830, la compañía ballenera Samuel Enderby & Sons, contrató a Biscoe como capitán del bergantín Tula y como jefe de la expedición para encontrar nuevos lugares de caza de focas en el océano Meridional, conocida como expedición al océano Antártico (en inglés, Southern Ocean Expedition).
Acompañado por el barco Lively, zarparon de Londres y para diciembre habían llegado a las islas Shetland del Sur; siguieron navegando hacia el sur, atravesando el círculo polar antártico el 22 de enero de 1831, poniendo rumbo al este a llegar a los 60°S.
Además, cuatro días después, el 21 de febrero, descubrieron un litoral más extenso.
De nuevo sospecharon que habían descubierto un continente, a esa zona, Biscoe la bautizó como Tierra de Graham,[2] en honor del Primer Lord del Almirantazgo Sir James Graham.
Biscoe desembarcó en la isla Anvers y afirmó haber avistado el continente de la Antártida.
Se trataba de islas en el océano Austral que habían sido avistadas anteriormente por otros marinos, pero que durante bastante tiempo fueron declaradas islas fantasma al no haber sido avistadas de nuevo.