Jugó durante tres temporadas con los Blue Devils de la Universidad de Duke, en las que promedió 7,3 puntos y 4,3 rebotes por partido.
[3] En su primera temporada en el equipo promedió 6,2 puntos y 3,3 rebotes por partido.
[4] Al año siguiente, con la llegada de Lenny Wilkens al banquillo de los Sonics, todo cambió, pasando a ser el último jugador en salir a pista.
En 1970 fue incluido en el Draft de Expansión por la llegada de nuevos equipos a la liga, siendo seleccionado por los Portland Trail Blazers,[3] quienes sin embargo rehusaron hacerse con sus servicios.
Fichó entonces por los Pittsburgh Condors de la ABA, donde volvió a recuperar minutos en pista, promediando 6,2 puntos y 4,2 rebotes por partido en su única temporada en el equipo.