Fue el máximo anotador de la misma, con 26 puntos por partido.
Pero Carroll se encargó de acallar a los que lo criticaron, tras promediar 18,9 puntos y 9,3 rebotes, lo que le hizo merecer el aparecer en el mejor quinteto de rookies de la temporada.
En la temporada 1984-85 fue fichado por el Olimpia de Milano, donde su aportación fue vital para que el conjunto italiano consiguiera un triplete histórico: Campeonato LEGA, Copa de Italia y Copa Korac.
Al acabar la temporada, fichó por los New Jersey Nets donde estuvo dos años, acabando su carrera en 1991, tras pasar por Denver Nuggets y Phoenix Suns.
En sus 10 temporadas en la NBA, promedió 17.7 puntos y 7,7 rebotes por partido.