Joaquim[2] (conocido también como Joacín o Joacim)[1] fue un rey de Judá que gobernó entre 608 y 598 a. C.[3] Fue hermano y sucesor de Joacaz, y su nombre original era Eliaquim o Eliaquín.
[1] Sin embargo, en 605 a. C., Necao II fue derrotado por Nabucodonosor II de Babilonia en Carquemis, por lo que Babilonia se convirtió en la potencia dominante de la zona.
Tras acabar su campaña contra Egipto, Nabucodonosor II sitió Jerusalén, haciendo que Joacim se declarara vasallo y le pagara tributo con recursos de la tesorería, artefactos del Templo y la entrega de algunos miembros de la familia real y la nobleza como rehenes.
Entonces Nabucodonosor II incitó a bandas de arameos, amonitas y moabitas a realizar incursiones contra Judá, y él mismo empezó un asedio en Jerusalén con la intención de llevarse prisionero a Joacim a Babilonia.
[7] Pero esto no pudo realizarse porque el rey murió antes de que el asedio terminara, probablemente asesinado por los partidarios de la sumisión a Babilonia, y, según Josefo, su cuerpo fue arrojado fuera de las murallas de la ciudad.