Jiří Hájíček

Su narrativa refleja la realidad cotidiana checa tras la caída del telón de acero, así como el surgimiento de nuevas oportunidades tanto laborales como en la vida en general, factores que afectan en gran medida a sus personajes principales.

[1]​ Sin embargo, la novela Dobrod ruzi hlavního proudu (2002), rompe parcialmente con el anterior esquema; en ella, el flujo de la narración alterna entre el citado Pavel y su novia Dominika y, por vez primera, está ambientada en Praga.

Está enmarcada a finales de los 80, cuando Pavel es un brillante estudiante con un prometedor futuro como investigador.

[1]​ En 2013 Hájíček recibió de nuevo el premio Magnesia Litera —en este caso en el apartado Libro del año— por su obra Rybí krev (2012).

Pero el lugar en el que ella había imaginado instalarse, casarse y trabajar como maestra de escuela, aparece ante sus ojos como un pueblo fantasma.