Isla de Santa Catalina (España)

[2]​ En los años 80 y 90 del siglo XX fue sepultada y unida a tierra firme, debido al desmesurado crecimiento de los desechos vertidos en el vertedero de la ciudad.

Entre la isla y la península de Almina se producen hileros, estos son marcas que se forman en la superficie del agua y cuyo origen es debido a la dirección de una corriente marina.

Son zonas en las que hay que extremar la precaución por la fuerza de las corrientes y el paso de la superficie del mar a marejada o, en algunos casos, fuerte marejada.

En aquel lugar arrojaban los mulos y caballos que morían en Ceuta.

La piedra se apoyaba en la popa del bote, y este, a través de la cuerda remolcaba al equino al lugar considerado oportuno, donde dejaban caer la piedra.