En la propuesta derivada del informe popularmente denominado Informe Roca,[1] se preveía integrar los pueblos de Llesp, Iran e Irgo en el término municipal del Valle de Bohí.
El nombre de la localidad proviente del vasco, que significa pueblo pequeño.
La primera parte del topónimo, Ir- es el mismo componente de 'Iran y Erill, entre otros.
El pueblo, según él, estaba formado por siete casas agrupadas y una separada a un cuarto de hora, de un solo piso, que formaban una sola calle irregular, llana y sin empedrar.
Se obtenía centeno, cebada, avena, legumbres y patatas, además de los pastos.
Su interés radica en que ofrece vistas espectaculares del Pirineo.