Instituto de Reforma Agraria

Durante los gobiernos de Manuel Azaña (bienio reformista o republicano-socialista) fue la medida más trascendental, ya que España vivía una agricultura estancada en la tradición latifundista.

Al mismo tiempo se formaron organizaciones opuestas al Instituto, como la Asociación de Propietarios de fincas rústicas, que se oponían a dichas reformas.

Durante el llamado Bienio radical-cedista el organismo se vio aún más ralentizado en sus medidas.

Tras la guerra, la dictadura anuló totalmente el programa del IRA.

Ya en plena contienda en la zona sublevada se había creado el Servicio Nacional para la Reforma Económica y Social de la Tierra (SNREST), denominado después Servicio de Recuperación Agrícola, con el único objetivo de emprender una contrarreforma agraria.