Menonitas en Argentina

Asimismo, los últimos menonitas de Rusia que se radicaron en Canadá, tuvieron un breve paso por Alemania y luego partieron hacia su nuevo país.

De acuerdo a Lutero, esto representaba una corrupción inaceptable mediante la cual cualquiera podía hacer la aberración más grande que total la tapaba con dinero.

Aun así, Conrad Grebel, Felix Manz y otros asociados de Zuinglio no sintieron que la Reforma estaba yendo lo suficientemente lejos.

En los primeros tiempos, Menno Simons, originalmente un sacerdote católico, se enteró del movimiento anabaptista, los planteos le parecieron coherentes, y entonces comenzó a repensar su Fe.

Un segundo impulso para emigrar fue la ley de asentamiento sancionada en Canadá, la cual prohibía la cooperativa agraria, justamente la forma en que viven los menonitas.

Argentina perdía así la gran oportunidad de radicar a tan productivos agricultores en su territorio, la cual fue rápidamente aprovechada por esos dos países.

El motivo es que allí también se asentaron más tarde los llamados menonitas de la antigua orden (en inglés: Old Order Amish).

Sin embargo, no mantuvieron su integridad étnica, fusionándose con la comunidad de una iglesia luterana fundada por algunos inmigrantes alemanes que también habían llegado al país y estaban radicados en una zona rural.

Sin embargo, una vez en Buenos Aires, la comisión tomó contacto con las autoridades de México a través del embajador mexicano que trabajaba en la capital argentina.

Dicha colonia mexicana había quedado próxima a la violenta Ciudad Juárez, donde la vida se les haría cada vez más difícil.

El propio gobierno de San Luis les aconsejó asentarse allí, ya que esas tierras son menos deseables y, por tanto, más baratas.

[35]​ La nobleza inherente a la idiosincrasia menonita hace que no contraataquen, convirtiéndose en el blanco favorito de los ataques cobardes.

Entonces, si bien los jóvenes tendrán la posibilidad de quedarse en la colonia o irse (no están secuestrados), se busca minimizar las tentaciones.

Por ejemplo, algunos menonitas adultos pagan para que otra persona tenga un celular a su nombre y ellos puedan usarlo en caso de necesidad.

Los menonitas no solo se dedican a los trabajos del campo, ya que al ser autosuficientes, también cubren las otras áreas necesarias para el funcionamiento de la colonia.

En simultáneo, como sus familiares tampoco cobrarán pensiones, necesitan trabajar aun más para prever situaciones de necesidad, catástrofes, etc.

Solo una política pública orientada a evitar el desarraigo de las laboriosas familias menonitas podría remediar esta pérdida.

En el siglo XIX, Argentina estableció una política estatal de "integración", intencionalmente orientada a diluir las identidades étnicas particulares.

Es decir, se espera que ellos adopten una cultura extraña, lo cual va más allá del mero cumplimiento de las leyes locales.

No todos los menonitas étnicos o sus descendientes viven apartados del resto de la sociedad conservando su idioma y tradiciones.

Las principales iglesias menonitas de las Américas, por tanto, no representan a estas personas como grupo étnico, algo que mucha gente ignora.

El ancestro directo de Eisenhower, Hans Nicol Eisenhauer, fue un alemán menonita que se estableció en Lancaster, Pensilvania, en 1741.

Como contrapartida, los descendientes de los menonitas que continuaron viviendo apartados hasta nuestros días presentan una bajísima deserción.

Cambiaron su modo de vestir, incorporaron más tecnologías, etc. Algunos menonitas no lo vieron bien, preguntándose entonces para qué habían abandonado Canadá en su momento.

Si bien esto llevó a que algunos se fueran de Paraguay, la mayoría acompañó la modernización porque fue una decisión tomada por la propia comunidad (no una imposición desde afuera).

Esta posibilidad de rebelarse sin por ello perder todos los lazos con su comunidad solo la tienen cuando los asentamientos menonitas son lo suficientemente numerosos.

Por esta razón, para los menonitas expulsados de las colonias más tradicionales, es muy importante tener otras colonias menonitas donde ir, no necesariamente ya por motivos religiosos, sino por el aspecto étnico, es decir, la posibilidad de volver a compartir con su gente, personas que hablen el bajo alemán, hayan tenido una historia similar para comprenderse y apoyarse, hagan sus mismas comidas, etc.

Solo una minoría de todos los amish que emigraron a Estados Unidos se mantuvo aislada, formando dicho grupo étnico.

En cambio, las amish suelen llevar un rodete tirante y una kapp (también llamada prayer covering), una especie de cofia, lo que refuerza su aspecto más severo o estático.

Más concretamente, la confusión surge porque, a lo largo del tiempo, 1 sola palabra ha sido usada para referir 2 cosas distintas (religión y etnia).

Ubicación del departamento Guatraché en la Provincia de la Pampa.
Algunas familias menonitas de México decidieron emigrar a la Argentina a causa de la inseguridad.
Vista aérea parcial de 3 "campos" (o Dörfer ) de Colonia La Nueva Esperanza en el Departamento Guatraché , Provincia de La Pampa , Argentina . En el centro se observa el "Campo 4" con las viviendas ubicadas a lo largo de su calle central.