[5] Inma dice que aprendió a leer literatura "muy pronto": "Mi padre era poeta y mi madre ha sido una gran aficionada a la lectura, así es que desde muy jovencita ella nos elegía los libros".
Tenía su novela en la cabeza desde hacía tiempo, pero no se la contó a nadie.
Yo he hecho la novela que a mí me hubiera gustado leer.
[7] En 2011 resultó finalista del Premio Planeta con su cuarta novela Tiempo de arena, y la escritora comentó entonces esperar que este galardón le diera identidad propia como autora, porque hasta el momento, según explicó, ha habido mucha tendencia a identificarla con su hermana.
La gente la adoraba y cuando yo comencé a publicar querían ver en mí la prolongación de Dulce", dice la autora.