Ingeniería neuromórfica
Ingeniería neuromórfica, también conocida como cómputo neuromórfico,[1][2][3] es un concepto desarrollado por Carver Mead, a finales de 1980, explicando el uso del sistema de integración a muy gran escala (VLSI) que contienen circuitos analógicos para imitar estructuras neurobiológicas ubicadas en el sistema nervioso.En fechas más recientes, el término neuromórfico ha sido utilizado para describir software analógico, digital, y pseudo analógico-digital VLSI que implementa modelos de sistemas neuronales (para percepción, control motriz, o integración multisensorial).Un aspecto clave de la ingeniería neuromórfica es entender cómo la morfología de neuronas individuales, circuitos y estructuras en general crean operaciones computacionales deseadas, afectan cómo la información es representada, influyen en la robustez al daño, incorporan aprendizaje y desarrollo, se adaptan a cambios locales (plasticidad) y facilitan cambios evolutivos.[12] Un proyecto de investigación con implicaciones para la ingeniería neuromórfica es el proyecto cerebro humano, una colaboración de 10 años que está intentando simular un cerebro humano completo en una super computadora usando datos biológicos.La simulación de un cerebro humano completo necesitaría super computadoras diez mil veces más capaces que las que tenemos hoy en día y por lo tanto esta el enfoque en computadoras neuromórficas.