Asistió a las clases de Adelita Domingo y comenzó cantando en las denominadas Galas Juveniles del sevillano Teatro San Fernando, ya desaparecido, un repertorio basado en los de Concha Piquer, Juana Reina e Imperio Argentina, cuyos estilos vocales ejercieron una influencia decisiva en su voz.
Con timbre redondo y tesitura vocal de alto realizó algunos estudios en el conservatorio con el tenor Álvarez Osorio que acrecentaron y mejoraron su técnica mientras exploraba las posibilidades que le ofrecía la zarzuela.
En 1952 realiza una gira por Hispanoamérica sobre escenarios de Colombia, Venezuela, Panamá, Costa Rica, Nicaragua y Cuba.
Poco renovados el repertorio y el estilo en tiempos cambiantes, fue perdiendo mercado paulatinamente.
madrileña bonita (Naranjo, A. Molina Moles, J. Alfonso); Tientos de punto y coma (Ochaita, Valerio, Solano); No se va la paloma (Ochaita, Valerio, Solano); La chiquita piconera (León, Quiroga, Callejón); No te mires en el río (León, Quiroga, Quintero); Tu calle (C. Larrea); Viento del sur (Segovia, C. Murillo); Sevillanas de filigrana (León, Quiroga, Quintero); Ay, torero mío (Florido, Segovia, Villafranca); Hechizo cordobés (Durango, Bolaños, Villajos); Villancico gallego (Jaén, Monreal) Sin pañales (Jaén, Monreal) Los porteros (Jaén, Monreal) Villancicos del alba (Molina, León, Quiroga) La niña de puerta oscura (León, Quiroga, Quintero).