El monumento está construido en piedra blanca, tiene una cúpula y cuatro columnas en el interior.
Sus proporciones están alargadas con el propósito de que su perfil resulte más esbelto, aunque esta solución arquitectónica hace que su interior sea demasiado oscuro para celebrar misas.
[2] Durante siglos, esta iglesia conmemorativa acogió a todos los que se acercaban al palacio de Bogoliúbovo.
En primavera, la zona estaría inundada, y la iglesia parecería flotar sobre el agua.
Las paredes aún están cubiertas con tallas del siglo XII.