Esta iglesia es uno de los más destacados templos que embellecen la urbe.
[1] Según el Párroco Rigoberto Moreno, esta iglesia resulta muy difícil mantenerla, por la estructura antigua que tiene.
[3] Actualmente el templo posee un estilo neoclásico, guarda sus muros coloniales y su interior se distingue por sus tres naves.
Entre los años 1920 y 1930 se realizó la última reconstrucción, llevada adelante por los hermanos José Ignacio e Isaac María Peña, ambos sacerdotes.
Las personas acuden a participar con fe en las celebraciones particularmente para el Jubileo, la Dolorosa, el Señor de Nazareth (Churoncito) y San Francisco.