Próximo a su desembocadura el Barranco se bifurca en dos ramales, dejando en medio una planicie donde se ubica el Bien compuesto por tres hornos, un almacén y una caseta-vivienda de los caleros, así como un aljibe.
Está construido a base de mampostería careada al exterior y ripiado tanto en sus superficies planas como cilíndricas.
Debido a su altura suponen excelentes “miradores” del extenso paisaje costero que los rodea.
Anexo a este existen unos corrales y habitaciones que se empleaban para acoger a los caleros y al ganado del que disponían para su propio sustento.
Es el más pequeño del conjunto, de tipología circular, troncocónica escalonada, con la boca orientada al Sudoeste, siendo el más próximo al mar y con similar construcción a los anteriores.