Homo novus [a] fue la expresión usada en la Antigua Roma para designar a los hombres que eran los primeros de su familia en acceder al Senado romano o, más explícitamente, en ser elegidos cónsules.
[1] Cuando un hombre sin profundas raíces familiares senatoriales entraba en la vida pública hasta alcanzar un alto cargo mediante un ascenso sin precedentes el término usado era novus civis o «ciudadano nuevo».
[2] De acuerdo con la tradición, tanto el Senado como el consulado estaban restringidos a los patricios.
En el año 63 a. C. Cicerón fue el primer homo novus en más de treinta años.
[3] Hacia finales del periodo republicano la distinción entre clases se hizo menos importante.