La escena muestra a cuatro niñas al crepúsculo recogiendo y rastrillando hojas caídas en un jardín, un lugar que ahora ocupa Rodney Gardens en Perth, Escocia.
Están haciendo una hoguera con la hojarasca amontonada, pero el fuego en sí aun es invisible, solo sale humo de entre las hojas.
El humo, las hojas muertas y el sol poniente así como los rostros sombríos de las muchachas parecen confirmarlo.
Elegí el tema de las hojas quemadas como el más calculado para producir este sentimiento.” [7] Millais siempre mostró debilidad por el otoño.
Para mí no hay nada que me traiga recuerdos más dulces de días pasados.