es una estampa japonesa de estilo ukiyo-e del artista Katsushika Hokusai, producida entre 1830 y 1832.
Se encuentra entre la provincia de Musashi, donde pertenece Edo, y Sagami, al oeste.
Cuando se recorre a pie una travesía cercana a una gran montaña, es común la sensación de que el avance se frena ante la abrumadora inmovilidad del monte, que parece que siempre estará acechando, «esta sensación se expresa líricamente en esta impresión».
Estos elementos se distribuyen de forma uniforme, lo que crea equilibro en la escena.
En tanto el resto de viandantes se encuentran absortos en sus tareas, el novio está interesado en el monte Fuji, que incluso parece señalar con su vara.