Historia de los judíos en Estados Unidos

La historia de los judíos en Estados Unidos comienza desde los tiempos coloniales, en donde ya existían comunidades judías.

Por ejemplo, muchos judíos alemanes llegaron a mediados del siglo XIX, establecieron negocios textiles en pueblos a lo largo del país, formaron sinagogas reformistas y estuvieron activos en el área bancaria de Nueva York.

En el ámbito político, los judíos americanos han estado especialmente activos como parte de la coalición liberal del New Deal del Partido Demócrata desde la década de 1930, aunque recientemente hay un elemento Republicano conservador entre los judíos ortodoxos.

La comunidad judía se expandió a otras grandes ciudades, particularmente alrededor de Los Ángeles y Miami.

Sin embargo, casi el 25% de los judíos estadounidenses no se encuentran afiliados a ninguna denominación.

Dos hermanos llamados Silvedo y Manuel Rodríguez están documentados en Lancaster County, Virginia, alrededor de 1650.

El gobernador Peter Stuyvesant trató de dar más impulso a su Iglesia Reformada Neerlandesa discriminando a otras religiones, pero el pluralismo religioso ya era una tradición en los Países Bajos, y sus superiores en la Compañía Neerlandesa de las Indias Occidentales en Ámsterdam lo desautorizó.

En la Ciudad de Nueva York, la Congregación Shearith Israel es la congregación continua más antigua, habiendo comenzado en 1687 y construido su primera sinagoga en 1728 y cuyo edificio actual aun contiene piezas originales de la primera.

Mientras todos puedan sentarse seguros bajo sus propias viñas e higueras y no deberá haber nadie que le cause tener miedo".

El comerciante judío Aaron Lopez fue instrumental en el intercambio de esclavos en Newport, Rhode Island.

[19]​ En 1790, aproximadamente 2500 judíos en Estados Unidos enfrentaron un número de restricciones legales en varios estados que impedían a no cristianos detentar cargos públicos y votar, pero Delaware, Pensilvania, Carolina del Sur y Georgia pronto eliminaron estas barreras, así como lo hizo el Bill of Rights en 1791 en general.

[20]​ Otras barreras no cayeron oficialmente por décadas hasta 1842 en Rhode Island, 1868 en Carolina del Norte y 1877 en Nuevo Hampshire.

A pesar de estas restricciones, que fueron ejecutadas muchas veces en forma desigual, había realmente muy pocos judíos en Estados Unidos de los siglos XVII y XVIII para que los incidentes antijudíos se volvieran un fenómeno social o político significativo en la época.

[21]​ Siguiendo tradiciones religiosas y enseñanzas culturales sobre el mejoramiento de los correligionarios, los residentes judíos en Estados Unidos comenzaron a organizar sus comunidades en el principio del siglo XIX.

Ejemplos tempranos incluyen un orfanato judío creado en Charleston, Carolina del Sur en 1801 y la primera escuela judía, Polonies Talmud Torah, establecida en Nueva York en 1806.

En 1843 se fundó la primera organización judía secular nacional en Estados Unidos, el B'Nai B'rith.

[22]​ La Texas española no recibía judíos fácilmente identificables, pero llegaron de cualquier modo.

Los judíos se casaban con personas de otras religiones libremente, continuando una tendencia que había comenzado un siglo antes.

Sin embargo, cuando la inmigración incrementó la población judía a 50.000 hacia 1848, los estereotipos negativos sobre judíos se volvieron más comunes en los diarios, literatura, teatro, arte y cultura popular y los ataques físicos se tornaron más frecuentes.

La alta sociedad de EEUU ponía trabas para que los judíos se integrasen en su seno.

La Sinagoga Touro, construida en 1759 en Newport, Rhode Island, es la sinagoga más antigua aun en pie en Estados Unidos.
La Casa Gómez Mill, construida en 1714 cerca de Marlboro, Nueva York, por un judío sefardí de Portugal. Residencia judía más antigua aun en pie.
Congregaciones judías tempranas en las trece colonias británicas en América del Norte.