Hidrodemolición

Sin embargo, podemos conseguir la extracción controlada y/o selectiva del hormigón operando sobre los distintos parámetros disponibles en el chorro producido como: la presión, el caudal, el tiempo, la velocidad, la inclinación, el movimiento, etc.

Básicamente, el chorro de agua consigue la extracción del hormigón principalmente a dos factores: 1.

La fuerza de impacto directa que ejerce el chorro de agua sobre la superficie del hormigón y 2, al superar su resistencia a la tracción sin dificultad debido a la porosidad que presenta el hormigón.

A título meramente informativo podemos establecer un valor promedio de medio metro cúbico por hora, empleando un sistema robotizado y 10 veces inferior con uno manual.

No podemos comparar esta técnica con otros métodos tradicionales de demolición del hormigón, como por ejemplo el uso de martillos, pues la hidrodemolición no afectará a los elementos metálicos embebidos en el interior del hormigón como son armaduras activas y pasivas, además de no provocar vibraciones, ni ningún tipo de fisuración en el soporte tras su paso, pues la energía se disipa en el momento del arrancamiento del agregado.

Hidrodemolición en el puerto de Ystad 2020.