El cuerpo es esbelto y la cabeza alargada con un hocico puntiagudo.
[8] Esto propició la introducción de la especie a Jamaica para combatir esta plaga, desde 1872.
[10] También muestran mayor diversificación genética debido a la variación y aislamiento de la población.
La especie se reproduce prolíficamente; los machos son maduros a los cuatro meses y las hembras tienen camadas de 2 a 5 crías por año.
[12] En España, debido a su potencial colonizador y constituir una amenaza grave para las especies autóctonas, los hábitats o los ecosistemas, esta especie ha sido incluida en el Catálogo Español de Especies Exóticas Invasoras, regulado por el Real Decreto 630/2013, de 2 de agosto, estando prohibida en España su introducción en el medio natural, posesión, transporte, tráfico y comercio.
Las mangostas son principalmente solitarias, sin embargo, en ocasiones pueden formar grupos y compartir madrigueras.