Llegó a pertenecer a varias instituciones académicas, como la Real Academia de Ciencias y Artes de Barcelona.
Años después se trasladó a Madrid, donde realizó estudios de ingeniería.
Gorría se especializó como ingeniero agrónomo, destacando también en el campo de la enología.
Desarrolló la mayor parte de su carrera profesional en Barcelona, donde fue docente e impartió algunas cátedras en la facultad de Ciencias.
Sus libros e investigaciones se especializaron en los problemas hidrológicos y agrónomos.