Primero tratan de quedarse con Lenny y con Jeff Albertson, pero sus departamentos eran demasiado raros.
En el estudio, los ejecutivos observan a muchas familias, hasta que finalmente seleccionan a los Simpson, luego de ver las reacciones de Homer ante lo que ocurría.
Pronto son llevados a la casa victoriana, en donde les dicen que serían filmados las 24 horas del día.
La única cosa que había en la casa del siglo XX (XXI para la versión hispanoaméricana) era un "Confesionario", el cual era una pequeña habitación con una cámara de vídeo, en donde podían decir lo que pensaran sobre la casa y su familia en general.
La familia lucha con los drásticos cambios en su vida cotidiana, y se sienten muy mal, para gran agrado del público.
Este cambio de actitud no entretiene al público, sin embargo, y el programa comienza a perder televidentes.