UU. y el ejército iraquí llevaron a cabo numerosos ataques letales en el área de insurgentes suníes.
Esta violencia se expandió por el norte de Irak contra el gobierno iraquí.
En Jordania, el líder religioso e influyente Sheikh Abdul Malik al-Saadi declaró: “la defensa personal se ha convertido en un deber legítimo y legal”.
Algunas tribus suníes se movilizaron, declarando la yihad contra Bagdad.
[1][3] Hawija, junto con Mosul, se trata de un área donde Dáesh lleva a cabo frecuentemente ejecuciones en masa.