Construido entre los años 120 y 138, bajo la administración del emperador Adriano[2] por la Cohors IIII Delmatarum, como atestigua una inscripción honoraria fechada entre 126 y 130[3] y ocupado por un destacamento de infantería dálmata hasta el siglo II,[2] el fuerte fue abandonado durante la invasión de Caledonia por Antonino a mediados del siglo II.
[2] Durante este tiempo, se desarrolló en torno a él un extenso vicus.
[6] En el interior del fuerte se levantaban varias construcciones de piedra: un granero, un cuartel general y un edificio utilizado como residencia del jefe de la guarnición.
[2] Es probable que también hubiera otras construcciones en madera para el alojamiento de los soldados.
Las primeras excavaciones arqueológicas en torno a Mediobogdum fueron llevadas a cabo en el siglo XIX; posteriores labores arqueológicas se desarrollaron en los años cincuenta y los sesenta del siglo XX.