Jugó con ellos hasta 2014 y su buen desempeño durante sus dos primeras temporadas como profesional, le permitió atraer la atención de los equipos del Super Rugby.
Parkes jugó siete partidos y no marcó puntos, mientras que el equipo terminó último en la tabla general.
Tras finalizar la Mitre 10 Cup 2014 se marchó al Reino Unido para jugar en los Scarlets, uno de los cuatro equipos galeses profesionales y por pedido del entrenador Wayne Pivac, también neozelandés y que conocía a Parkes de Auckland.
Tras tener tres años de residencia, se nacionalizó y aceptó jugar para Gales.
Hasta el momento lleva 7 partidos jugados y 15 puntos marcados, productos de tres tries.