Es conocida mundialmente por ser el escenario de la novela cumbre del romanticismo latinoamericano: María, obra maestra del escritor colombiano Jorge Isaacs.
El 18 de abril de 1953 fue adquirida por el departamento del Valle del Cauca y su primera restauración la realizó el maestro Luis Alberto Acuña en 1954.
Todo el edificio está rodeado por canales de agua que impedían el paso de insectos y serpientes, y garantizaban la frescura en sus interiores.
Además, está provista de frescos balcones y frondosa vegetación.
Desde la entrada a la hacienda y hasta su escalera se extiende un precioso jardín de rosas en el que, según la novela, María recogía cada mañana las flores más frescas para su amado Efraín.