[1] En 1923 ambas naciones se habían enfrentado en el incidente de Corfú, del que Mussolini salió humillado.
[1] Dos días más tarde, Metaxas expresaba al embajador británico la decisión del Gobierno griego de no ceder ante una posible amenaza o agresión italiana, que desencadenaría una guerra total.
[7] Los Gobiernos italiano y griego, sin ningún interés en un enfrentamiento, trataron de quitar importancia al ataque.
[10] Tres nuevas divisiones (Siena, Parma y Piamonte), fueron, no obstante, transferidas a Albania como se había solicitado anteriormente.
El anuncio el 12 de octubre desde Berlín del envío de una misión militar alemana para reorganizar el Ejército rumano y proteger las instalaciones petroleras de este país irritó a Mussolini, que sostenía que Hitler había vuelto a presentarle un hecho consumado y amenazaba con extender la hegemonía alemana a los Balcanes.
[13] El envío de tropas alemanas a Rumanía en octubre, sin consulta previa con Mussolini, hizo que este se decidiese a reafirmar la preponderancia italiana en la zona mediante el sometimiento de Grecia.
[16] Sin embargo, el mismo documento advertía que si las tropas italianas encontraban resistencia, esa resistencia sería doblegada por las armas y el Gobierno griego habría de asumir la responsabilidad de las consecuencias.
La mañana del 17 de octubre, se reunieron los jefes de los Estados Mayores del Ejército, la Armada y la Aviación italianas, para evaluar la campaña decidida dos días antes, en la que los dos últimos no habían podido participar.
[27] Estos valoraron las distintas formas de ayudar a Grecia pero no consideraron seguro que la flota operase entre Italia y Albania para estorbar el abastecimiento de esta y la ayuda en aviones fue al comienzo escasa.
[28] El 29 de octubre, sin embargo, comenzaron a ocupar posiciones en Creta, con permiso griego.
Los tres grupos contaban con las siguientes unidades:[30][31] Las divisiones italianas tenían insuficiente artillería y transportes,[32] los reservistas no habían recibido instrucción en el nuevo armamento y el cuartel general no estaba listo para la campaña.
[33] La larga campaña propagandística contra Grecia había echado a perder también el factor sorpresa, permitiendo la movilización griega.
[32] Su regimiento de tanques estaba formado por unidades ligeras, que se utilizaron inadecuadamente.
[32] En aviación, sin embargo, los italianos contaban con una superioridad total, incluso tras la llegada de la Royal Air Force británica, aunque el mal tiempo les impidió a menudo aprovechar esta ventaja.
[37] Su parque automovilístico era escaso, lo que se unía a una red de carreteras muy deficiente y a una única línea férrea entre Atenas, Salónica y Florina, lo que dificultaba el transporte hacia el norte.
[40] Los mandos italianos contaban con una escasa resistencia griega, con las tropas de este país concentradas en la frontera búlgara.
[45][27] No se preveía que la resistencia griega pasase de las dos semanas ante el teórico poderío italiano.
[45] Los alemanes veían la captura italiana de Grecia como un paso más hacia el control del Mediterráneo oriental y un refuerzo a la campaña contra Egipto.
[50] En esta zona la línea italiana la sostenía la división «Parma», reforzada en el último momento por la «Piamonte» y la «Venezia», que se estaba trasladando desde la frontera yugoslava.
Visconti Prasca fue reemplazado por el general Ubaldo Soddu[51] quien, pese a las presiones de Mussolini, no pudo efectuar ninguna operación ofensiva, contentándose con reorganizar la débil línea defensiva italiana.
[16] A mediados de mes, las divisiones que llegaban para sostener el frente eran divididas en sus componentes para ser distribuidas allí donde se consideraban más necesarias, a menudo sin el equipamiento necesario.
[56] Mussolini envió refuerzos, aumentando los efectivos a 162 000 hombres en diciembre de 1940, pero los griegos continuaron avanzando sobre territorio albanés hasta la segunda mitad del mes.
[59] Los italianos enviaron precipitadamente diez divisiones más al frente albanés entre enero y abril de 1941.
Exponerse a la llanura, donde los italianos podrían usar sus blindados y su fuerza aérea, no era una decisión sensata.
[67] Este había causado numerosas bajas y escasos avances a los italianos: de las siete divisiones que participaron en la fallida ofensiva, cinco quedaron destruidas o diezmadas.
[70] Los británicos, sin embargo, ofrecieron únicamente dos o tres divisiones y unas docenas de tanques, oferta que Metaxas consideró insuficiente pero lo suficientemente importante como para causar el ataque alemán.
[70] Sin apoyo británico, se propuso retirar algunas divisiones del frente albanés para tratar de oponerse al ataque alemán.
[73] Las tropas de tierra tampoco contaban con el transporte necesario para pasar a Grecia y no se había contado con el origen de las mismas, que podría retrasar varios meses su despliegue en Grecia.
Tanto bajaron las temperaturas, que el mando italiano comenzó a reemplazar a sus soldados provenientes del sur y centro de Italia, por soldados originarios del Norte, a los que se suponía que soportarían mejor el frío glacial de las altas y gélidas montañas de Epiro.
La banda de power metal bélico sueco Sabaton escribió una canción alusiva a este conflicto para su álbum coat of arms, titulada de la misma forma que el álbum "coat of arms"