La guerra civil nepalesa fue un conflicto que enfrentó al gobierno monárquico de Nepal con los rebeldes maoístas.
En un principio el gobierno del Reino de Nepal movilizó a la Policía para contener la insurgencia.
Durante la noche el Ejército nepalí desencadenó una lucha contra los insurgentes maoístas.
Bajo la protección de la guerra contra el terrorismo y con la meta de evitar el colapso del Estado que podría servir como base para una inestabilidad regional e internacional, los EE.
Varias negociaciones acompañadas por treguas temporales se fueron sucediendo entre el Gobierno y los insurgentes.
La única presencia en las numerosas pequeñas ciudades fueron escuelas públicas, ayuntamientos y comisarías de policía.
Una vez la insurgencia comenzó a controlarlas, las escuelas fueron lo único que aún quedaba del Gobierno nepalí en estas poblaciones.
En la búsqueda del liberalismo no debemos olvidar un importante aspecto de nuestra conducta, llamado disciplina».
Esto marcó una ruptura con la anterior postura del Partido Comunista de Nepal (Maoísta), que anteriormente se había opuesto vehementemente al proceso de democratización gradual que había sido defendido por el Frente Unido Popular.
[11] Desde el fin del conflicto hasta 2010 unos 31.000 excombatientes de ambos bandos se han desmovilizado.